La rehabilitación cardiaca (RHC) es un programa de salud multifactorial, dirigido al paciente que tiene una enfermedad cardiaca o ha sido operado de corazón. También está indicado, en aquellas personas que por presentar factores de riesgo de enfermedad cardiovascular, quieran disminuir las probabilidades de padecerla y mejorar su calidad de vida. Esta especialmente aconsejado en personas con hábito sedentario.
Se ha constatado que la mortalidad por dicha enfermedad disminuye hasta en un 40% por ciento si el programa se cumple en su totalidad, es decir, durante toda la vida del paciente. Las recaídas y reingresos hospitalarios descienden en un 50% y lo que también es muy importante, con una mejoría sustancial de la calidad de vida.
Nuestro propósito, es ayudarle a conseguir este objetivo.
Cuando haya finalizado los 4 meses del programa de rehabilitación cardiaca domiciliaria, le facilitaremos nuevas herramientas para que usted persista en la actividad y no recaiga en el sedentarismo. Lógicamente en ese momento usted ya se encontrará mucho mejor y evitaremos futuras complicaciones.
Si un paciente es de mayor riesgo o su estado de salud lo aconseja, debe realizar su rehabilitación cardiaca por lo menos en una primera fase, en un Centro Médico de RHC bajo supervisión directa. Las personas que tienen una enfermedad de bajo riesgo son un 80% de los pacientes; si su cardiólogo así se lo ha indicado, puede seguir un programa de RHC domiciliario, siempre que evidentemente siga sus controles periódicos y las indicaciones que a continuación le iremos detallando.
Al igual que los programas de Rehabilitación Cardiaca controlados en Centros Médicos, la Rehabilitación Cardiaca domiciliaria supervisada permite una recuperación integral del paciente; siempre que se sea perseverante y no abandone.